La Casa de la Cascada (1934-1939), de Frank Lloyd Wright.
Descripción.
La Casa Kaufmann o Casa de la Cascada (Kaufmann House o Fallingwater House) es la vivienda más famosa de las que diseñó Frank
Lloyd Wright. Desarrolló el proyecto entre 1934 y 1935 y lo construyó hasta 1939
en un enclave de la Reserva Natural de Bear Run (Pensilvania), una zona
montañosa y salvaje recorrida por un río con una cascada de 30 metros.
El propietario era un empresario, Edgar
Kaufmann, casado y con un hijo, que quería una casa de fin de semana y tenía un
notable gusto personal: había estudiado arquitectura un breve tiempo en la
escuela-residencia Taliesin de Wright. Había comprado el terreno en 1920 y en
principio deseaba que se situara frente a la cascada, pero Wright enseguida vio
la posibilidad de situarla encima. Su estancia en Japón le había familiarizado
con la arquitectura japonesa y en especial con su integración de los materiales
locales, el sonido del agua o la austeridad formal, que aplicó con éxito en
esta casa.
Análisis formal.
Se divide en dos partes: la casa
principal se construyó en 1936-1938 y el cuarto de huéspedes se acabó en 1939.
La chimenea es el elemento principal: se
levanta en vertical en las tres plantas e incluso sobresale claramente en la
terraza superior, organizando a su alrededor los espacios interiores y en
especial el salón de la primera planta como lugar de reunión familiar. Los
cimientos de la casa son las rocas del lugar, apenas talladas, que se asoman a la
chimenea en el salón, conectado con un comedor y una cocina compacta en la misma
primera planta. Hay tres dormitorios pequeños en el segundo piso, más una
habitación de estudio y dormitorio para el hijo en el tercer piso.
Todos los recintos de la casa se
relacionan con el entorno: del salón incluso sale una escalinata directa hasta
el río. Los techos son bajos, lo que dirige la mirada horizontal hacia afuera,
y los pasillos son estrechos y oscuros, sin ventanas, para favorecer el impacto
sorpresivo con la apertura exterior en las amplias terrazas en voladizo, proyectadas
en ángulos rectos, que favorecen la percepción escultórica de la vivienda en
contraste con el lecho ondulado de las rocas adyacentes. Las terrazas son una
hazaña de ingeniería, para la que Wright contó con los ingenieros de Mendel y
William Glickman Wesley Peters, que crearon una estructura de hormigón armado reforzada
con acero para aumentar la resistencia a la tracción.
Significado y contexto histórico-arquitectónico.
La obra resultó un manifiesto espectacular
de la corriente orgánica de la arquitectura moderna que encarnaba Wright, que desde
hacía años redefinía la relación entre el hombre, la arquitectura y la
naturaleza.
Su organicismo está cercano a la tradición
barroca de Bernini y Borromini y se inspira en las casas
tradicionales americanas y japonesas, en las formas y los materiales del
entorno (piedra generalmente, pero también ladrillo u hormigón), combinando
estos materiales diversos de manera que se obtienen efectos de color. Se adecua
a los modelos espaciales de la naturaleza, frecuentemente celular, con su
estructura compositiva basada en la combinación geométrica de patrones
repetitivos, a menudo pequeñas unidades geométricas insertas en el conjunto,
con un juego de interacción e interpenetración de los espacios interior y
exterior, entre el edificio y el jardín (o la plaza), creando con frecuencia
espacios íntimos en claroscuro mediante una luz indirecta, con un lenguaje arquitectónico
muy atento a lo local y lo particular. Utiliza grandes terrazas
suspendidas (gracias al hormigón reforzado con acero), rodeadas a menudo de
árboles, de modo que parece que las rocas y los árboles formen parte de la
construcción.
FUENTES.
Internet.
Documentales / Vídeos.
Fallingwater House. 4:19. [https://www.youtube.com/watch?v=eKLAsixJ5hY]
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